Antiguas poesias

Por poco       2/5/99


Mil años Luz nos separan
o un segundo si me tocas,
pero no con dedos suaves,
yo te enseñaré otra forma.


Aunque maestro no sea 
en esta o ninguna cosa,
te enseñaré lo que sepa,
mira mis ojos ahora.


Sumérgete bien profundo,
alcanza mi fondo en calma,
lava hirviente que no quema,
en la que espera mi balsa.


Súbete y míralo entonces,
todo en derredor alcanza,
lago de lava en espíritu,
siente el calor en tu cara.


Llévalo bien, bien adentro,
confróntalo con el frío
con que velo estos dos ojos
y entenderás porqué pasa.


Tócame suave, ahora sabes
lo que oculto tras la escarcha,
mírame y bucea sin miedo,
coge aire, te hará falta.


Y después respira hondo
agua de fuego que abrasa.
Si te quedas, ya me tienes.
Si te vas, no he dicho nada.